El Camino de los CELTAS

DÍA 08: 21 DE ABRIL

LETTERKENNY – VISITA A SLIEVE LEAGUE, Los acantilados druidas
Desayuno en el hotel y salida para visitar los Slieve League Cliffs. Los acantilados más altos de Europa, con más de 600 metros sobre el
Atlántico. En tiempos antiguos, los druidas realizaban aquí ceremonias al dios del mar Manannán Mac Lir.
El mirador de Bunglas Point ofrece una vista imponente, y los más aventureros pueden caminar por One Man’s Pass, una cresta estrecha
entre cielo y mar.
En días de niebla, dicen que se vislumbra la tierra mítica de Tír na nÓg, el reino de la juventud eterna. 
Regreso a Letterkenny. Cena en el hotel.

DÍA 09: 22 DE ABRIL

LETTERKENNY – BELFAST, Cruzando a la Tierra del Gigante
Desayuno en el hotel y salida hacia Belfast. Haremos una parada en Grianán of Aileach, un fuerte circular del 1700 a.C. conocido como el Templo del Sol. Desde su cima se observan tres condados y dos países. Se cree que este lugar era un chakra energético de Irlanda y sede de coronación de reyes. Continuación para hacer breve parada en el mirador de White Rocks y Dunluce Castle, un Castillo medieval en ruinas suspendido sobre un acantilado. Su historia mezcla amor, tragedia y leyenda; se dice que su cocina cayó al mar durante una tormenta, y aún se escuchan las risas de los cocineros perdidos. 
Llegada a Giant’s Causeway, visitaremos esta Maravilla natural declarada Patrimonio Mundial por la UNESCO. Más de 40.000 columnas de basalto hexagonales formadas por antiguas erupciones volcánicas. 
Tiempo para almorzar en el lugar y opcional será nuestra parada en Carrick-a-Rede Rope Bridge, puente colgante sobre el mar con vistas impactantes. Haremos una última parada en The Dark Hedges, una avenida de hayas entrelazadas de más de 300 años, cuya atmósfera mágica inspiró a artistas y cineastas (Game of Thrones). Se dice que por la noche aparece la Dama Gris, protectora de los bosques antiguos. 
Llegada a Belfast, capital de Irlanda del Norte. Alojamiento y noche libre para disfrutar del animado Cathedral Quarter, lleno de pubs y música celta.

DÍA 10: 23 DE ABRIL

BELFAST, Ciudad de Conflictos y Renacimiento
Desayuno en hotel. Visita de Belfast, conocida por su turbulenta historia y su vibrante escena cultural. Al llegar, realizaremos una visita guiada centrada en los conflictos entre protestantes y católicos y la historia del IRA.
Tendrás la oportunidad de ver los Muros de la Paz, muros cubiertos de grafitis que aún separan algunas zonas de la ciudad y que son un mensaje poderoso aún latente. También aprovecharemos para explorar la zona del Barrio de la Catedral, llena de murales y pubs históricos.
Tarde libre. Alojamiento en Belfast.

DÍA 11: 24 DE ABRIL

BELFAST – GLASGOW, Cruzando el Mar de Irlanda
Desayuno en el hotel y salida hacia Escocia en ferry. Hoy dejamos atrás la isla Esmeralda para cruzar el North Channel, el brazo de mar que separa Irlanda de Escocia. Este estrecho, de apenas 21 kilómetros en su punto más angosto, ha sido puente y frontera durante milenios: por aquí pasaron los Scoti, el pueblo irlandés que dio nombre a Escocia; por aquí navegaron monjes cristianos llevando el evangelio; por aquí, en tiempos modernos, cruzaron emigrantes, soldados y mercancías. 
El ferry parte de Belfast dejando atrás la silueta de Cavehill y las grúas del Titanic Quarter. A bordo, sus ventanas panorámicas invitan a contemplar el mar gris-verde, y si el día está despejado se pueden ver las costas de ambos países a la vez: una geografía que habla de cercanía cultural, de lazos que ninguna frontera política puede romper del todo. Duración del viaje en ferry 2 horas y media. 
Llegada a Cairnryan, Escocia. El acento cambia, el paisaje también: más áspero, más salvaje, más vertical. Las Low lands (Tierras Bajas) escocesas nos reciben con colinas ondulantes, granjas de ovejas y muros de piedra seca que trepan por las pendientes. 
Si el tiempo lo permite, una desviación hacia el sur nos lleva a Culzean Castle, encaramado en los acantilados de la costa de Ayrshire. Este castillo del siglo XVIII, hogar del Clan Kennedy, es una maravilla arquitectónica. 
Continuación hacia Glasgow una ciudad de arquitectura industrial transformada en arte, de murales urbanos que rivalizan con museos, de pubs donde la música celta se mezcla con el indie rock. Alojamiento.

DÍA 12: 25 DE ABRIL

GLASGOW – INVERARAY, Tierras Altas del Sur
Desayuno en el hotel. A continuación realizaremos un tour panorámico por la ciudad metropolitana de Escocia, incluyendo George Square,
Merchant City, Glasgow Green y su Universidad. Tiempo de almuerzo y salida hacia Inveraray.
Dejamos atrás la ciudad para adentrarnos en las Southern Highlands (Tierras Altas del Sur), donde el paisaje cambia dramáticamente: las colinas se elevan, los lagos (lochs) se multiplican, y el verde se vuelve más intenso, llegaremos a Loch Lomond, el más grande de los lagos británicos por superficie y uno de los más hermosos. Sus aguas azul-acero reflejan las montañas que lo rodean, la de los Highlands y las Lowlands. Este lago marca la frontera geológica entre dos Escocias. 
Haremos una parada en Luss Village un pequeño pueblo de casas de piedra digno de una postal. 
Luego continuaremos ascendiendo por la carretera hasta llegar a Rest and Be Thankful (Descansa y Agradece), un paso de montaña a 240 metros de altitud en Glen Croe, cuyo mirador ofrece vistas espectaculares del valle glaciar, con sus laderas cubiertas de helechos y brezos. 
Este es el primer contacto real con las Highlands: salvaje, despoblado, sublime. Aquí comienza el verdadero Norte. Finalmente llegaremos a INVERARAY un pueblo de cuento: casas blancas de estilo georgiano alineadas a orillas del Loch Fyne fue diseñado en el siglo XVIII por el Duque de Argyll como un experimento urbanístico de un pueblo planificado, simétrico, armónico. 
El pueblo entero es una joya arquitectónica: fachadas blancas, techos de pizarra oscura, jardines cuidados. Pasear por su calle principal al atardecer, con el lago de fondo y las montañas tiñéndose de violeta, es un privilegio para los sentidos. Cena y alojamiento.

DÍA 13: 26 DE ABRIL

INVERARAY – FORT WILLIAM, Valle de Glencoe y Castillos de Leyenda
Desayuno en el hotel. Hoy continuamos el viaje atravesando valles rodeados de castillos iglesias encantadas y lugares de gran belleza con el contraste de las memorias de guerra y tragedia histórica de Escocia.
En la orilla noreste del Loch Awe, se alzan las ruinas de Kilchurn Castle, uno de los castillos más fotografiados de Escocia, construido originariamente sobre una isla por el Clan Campbell, con el tiempo y los cambios en el nivel del agua y la construcción de un istmo lo conectaron a tierra firme (aunque sigue siendo accesible solo cuando el lago está bajo).
Se dice que el fantasma de una Dama Gris recorre las ruinas en noches de luna llena, lamentándose por un amor perdido en batalla.
Pocos kilómetros más adelante, oculta entre árboles a orillas del Loch Awe, se encuentra una de las joyas más extrañas y menos conocidas de Escocia: St. Conan’s Kirk. Esta iglesia del siglo XX (1881-1930) su creador, Walter Douglas Campbell, mezcló 12 estilos diferentes en un solo edificio: románico, gótico, normando, bizantino… Cada ventana, cada capilla, cada arco es único. El resultado podría haber sido un desastre, pero es, en cambio, una obra maestra de eclecticismo.
Continuaremos hacia el corazón oscuro de las Highlands: Glencoe, el valle más dramático, más hermoso y más trágico de Escocia. “Valle del Llanto” o “Valle Estrecho” (del gaélico Gleann Comhann) no es solo bello, es un lugar marcado por la sangre. 
Allí sucedió una de las tragedias más infames de la historia escocesa, y su eco aún resuena en las piedras del valle. Tras la Revolución Gloriosa de 1688, el rey Guillermo III exigió que todos los jefes de clan escoceses juraran lealtad antes del 1 de enero de 1692. Alasdair MacIain, jefe del Clan MacDonald de Glencoe, llegó tarde a jurar (por una tormenta de nieve y confusión burocrática) y el gobierno decidió darles un escarmiento. El Clan Campbell, enemigos históricos de los MacDonald, recibió órdenes de alojarse en Glencoe bajo el pretexto de amistad. Durante 12 días, los Campbell comieron, bebieron y durmieron bajo el techo de los MacDonald, respetando las sagradas leyes de hospitalidad escocesa. Pero en la madrugada del 13 de febrero de 1692, los Campbell recibieron unseñal desde Signal Rock y comenzaron la masacre. 78 personas —hombres, mujeres, niños— fueron asesinadas mientras dormían y muchos más murieron huyendo por las montañas nevadas.
La traición a la hospitalidad es el peor crimen en la cultura celta. Desde entonces, Glencoe está considerado maldito. Se dice que en noches de niebla se escuchan los lamentos de los MacDonald asesinados, y que ningún Campbell debe jamás pisar el valle si quiere evitar la desgracia.
Pararemos en los puntos principales como el Three Sisters Viewpoint: El mirador más icónico, donde las tres montañas se alzan majestuosas y el valle se extiende hacia el oeste como una herida abierta en la tierra hacia Signal Rock, el lugar desde donde se dió la señal para iniciar la masacre.

Pararemos para almorzar en Glencoe Village, para luego continuar cruzando el puente moderno de Ballachulish que atraviesa el estrecho de Loch Leven, con vistas panorámicas del lago y las montañas circundantes, hasta llegar al Command Memorial, una estatua de bronce de tres soldados británicos mirando hacia las montañas. Desde allí apreciaremos la vista al Ben Nevis (1,345m) – montaña más alta del Reino Unido y el Great Glen el Valle glaciar que divide Escocia. 
Llegada a Fort Williams. Cena y alojamiento en el hotel.

DÍA 14: 27 DE ABRIL

FORT WILLIAM – ISLE OF SKYE, La Isla de las Hadas y Elfos
Desayuno en el hotel. Hoy nos adentramos en el territorio más mágico, más salvaje y más fotografiado de toda Escocia: la Isla de Skye (Ant-Eilean Sgitheanach en gaélico escocés, “La Isla Alada” o “Isla de la Niebla”). En esta isla la geología parece escultura surrealista, donde cada formación rocosa tiene nombre y leyenda, donde las hadas (sìthichean) aún se esconden en los valles y los gigantes duermen bajo las montañas. 
Skye es el reino de lo imposible hecho piedra: agujas que perforan el cielo, cascadas que caen en piscinas de color turquesa, acantilados que se desploman 300 metros hacia el Atlántico, donde la luz cambia cada cinco minutos y la niebla aparece y desaparece como respiración, donde el pasado druídico y el presente se entrelazan sin costuras. Será un día intenso, transformador. 
Salida desde Fort William a través de un paisaje de glaciares, montañas oscuras, lochs que parecen fiordos noruegos. Pasamos junto a Loch Garry, cuya forma vista desde lo alto se asemeja a un mapa de Escocia.
El camino nos conduce entre las Five Sisters of Kintail, cinco picos que según la leyenda eran siete hermanas convertidas en piedra por un mago para protegerlas de pretendientes indeseables. Las dos hermanas menores lograron escapar y aún vagan por las Highlands buscando a sus hermanas petrificadas, cruzaremos por el puente: el Skye Bridge, estructura de hormigón y acero que desde 1995 conecta la isla con el continente. Al cruzarlo, el paisaje cambia: la luz es más plateada, el viento más salado, las montañas más angulosas. Hay una sensación física de estar entrando en otro mundo, el Reino de las Hadas. 
Bajo el puente, la pequeña isla de Eilean Bàn (“Isla Blanca”) emerge brevemente: aquí vivió el escritor naturalista Gavin Maxwell, autor de Ring of Bright Water. Su faro blanco es como un centinela solitario en el estrecho. Al cruzar el puente, algunos viajeros tienen la tradición de hacer una pausa mental, cerrar los ojos por un segundo y “pedir permiso” a la isla para entrar. Skye no es un lugar que se visite: es un lugar que te acepta… o no. 
Iniciaremos el recorrido, con una visita al famoso Old Man of Storr, una caminata corta hacia uno de los lugares más emblemáticos de Skye, que ofrece vistas panorámicas del paisaje circundante. Es una aguja de roca de 55 metros de altura que se alza solitaria frente a un anfiteatro de acantilados desmoronados. Parece un dedo gigante señalando al cielo, o un anciano petrificado mirando eternamente hacia el mar. A su alrededor, docenas de pináculos más pequeños crean un paisaje lunar de piedra y hierba. El Old Man es considerado un punto de poder telúrico donde la energía de la tierra es especialmente intensa. Los practicantes de meditación reportan sensaciones de claridad mental y conexión espiritual, aquí acuden todos los druidas modernos. 
Visitaremos luego las encantadoras Fairy Pools, donde podrás admirar las cascadas cristalinas y las aguas transparentes al pie de las montañas Cuillin. Continuación a Fairy Glenn, un pequeño valle de colinas cónicas perfectamente simétricas que parecen construidas por manos no humanas. La más famosa es Castle Ewen, una colina con forma de torre escalonada en espiral, donde las formaciones rocosas a su alrededor asemejan mini castillos, rodeados de praderas verde esmeralda. El efecto es surrealista, de película, de fantasia, como un parque temático natural diseñado por las hadas.
Si el tiempo lo permite y el día es claro y el grupo aún está con energía, habrá una parada opcional en el: Neist Point, el punto más occidental de Skye y uno de los lugares más dramáticos de toda Escocia. Es un promontorio rocoso que se adentra en el océano como una espada de piedra. En su extremo, a 43 metros sobre el mar embravecido, se alza un faro blanco (1909) que parece una pieza de ajedrez solitaria.
Terminaremos el recorrido en el colorido puerto de Portree.
Alojamiento y cena en hotel en Skye.

DÍA 15: 28 DE ABRIL

ISLE OF SKYE – PITLOCHRY, Travesía hacia las Tierras Altas
Desayuno. Hoy nos despedimos de la Isla de Skye con una mezcla de melancolía y gratitud. La niebla matinal se aferra a las montañas Cuillin como si la isla misma seresistiera a dejarnos ir. Pero el camino nos llama: hacia el este, hacia el corazón de las Highlands Centrales.
En un día de contrastes: la belleza sublime de Eilean Donan iluminado por la luz dorada de la mañana, el silencio sagrado de túmulos neolíticos, el peso de la historia en Culloden, y finalmente el calor reconfortante del whisky escocés. Un día que nos llevará desde lo mítico hasta lo histórico, desde lo ancestral hasta lo victoriano.
Salida hacia Culloden Battlefield, donde se detuvo el tiempo el 16 de Abril de 1746, es el lugar más sombrío, más cargado de historia, más silencioso del viaje: el campo donde se libró la última batalla en suelo británico y donde murió el viejo mundo de los clanes escoceses. Los jacobitas, siguiendo la táctica tradicional de las Highlands (la temida “carga Highland”: correr gritando con espadas en alto), se lanzaron frontalmente contra las líneas gubernamentales y fueron masacrados.
La artillería los destrozó antes de que pudieran acercarse, los mosquetes dispararon en salvas disciplinadas. Los cañones cargados con metralla barrieron filas enteras, y los hombres murieron en el campo de batalla y cientos fueron ejecutados durante la persecución, heridos rematados sin piedad y solo 50 gubernamentales muertos. No fue una batalla fue una masacre. Culloden acabó con una forma de vida de mil años de antigüedad. Hoy ese lugar, que visitaremos, se convirtió en un museo al aire libre. 
Continuaremos luego hacia Inverness y tendremos tiempo para almorzar. 
Más tarde visitaremos una destilería de whisky, previo a la llegada a Pitlochry (Perthshire), encantador pueblo victoriano rodeado de montes y bosques. 
Cena y alojamiento. 
Si hay energía, sugerimos un paseo por su calle principal o hasta la presa donde los salmones saltan contracorriente: metáfora perfecta del espíritu escocés.

DÍA 16: 29 DE ABRIL

PITLOCHRY – EDIMBURGO, Ruta de Castillos y Libertadores
Desayuno y salida hacia el pueblo de Falkland que parece detenido en el tiempo, con casas de piedra y ambiente de leyenda. Escenario de Outlander, donde se representó la ciudad de Inverness del siglo XVIII, al principio de la saga. 
Continuaremos hacia Culross, el pueblo que detuvo el tiempo. Sus calles empedradas, casas ocres y fachadas blancas conservan el aspecto del siglo XVII. También fue locación clave de Outlander (Cranesmuir, el pueblo de Geillis Duncan, la bruja). Tendremos tiempo para almorzar antes de continuar hacia Wallace Monument, torre de 67 metros, homenaje al héroe nacional William Wallace, el libertador escocés inmortalizado en Braveheart. 
Desde su cima, las vistas abarcan Stirling y los campos de batalla donde se forjó la independencia.
La espada de Wallace, de más de metro y medio, aún se conserva como símbolo de coraje. Cruzaremos el Stirling bridge, puente emblemático donde Wallace derrotó a los ingleses en 1297, usando la astucia y el conocimiento del terreno. 
A continuación visitaremos el Castillo de Stirling, la Llave de Escocia Residencia de los reyes Stewart, fue escenario de coronaciones y conspiraciones. En su Royal Palace y Great Hall se respira esplendor. 
Más tarde haremos una breve parada en Midhope Castle, el mítico Lallybroch de Outlander. Aunque no se puede ingresar, su torre en ruinas evoca la esencia de la Escocia profunda: piedra, niebla y memoria. Parada fotográfica ideal para los amantes de la saga. 
Llegada a Edimburgo, la capital que combina historia, misterio y un espíritu eterno. Alojamiento en el hotel.

DÍA 17: 30 DE ABRIL

EDIMBURGO, La Ciudad de los Fantasmas y Reyes
Desayuno en el hotel y visita de Edimburgo incluyendo Royal Mile, Castillo de Edimburgo (entrada incluída) y Palacio de Holyroodhouse.
Tarde libre. Alojamiento
Nota: el 30 abril por la noche (víspera de Beltane) se realiza un festival moderno que recrea rituales celtas, acuden miles de personas, performances con fuego, tambores, procesiones, danza alrededor de hogueras, etc. Si deseas asistir, se deben sacar entradas con mucha anticipación.

DÍA 18: 1 DE MAYO

EDIMBURGO
Desayuno en el hotel. A la hora adecuada traslado al aeropuerto.
FIN DE ESTA MEMORABLE EXPERIENCIA DE VIAJE